martes, 18 de diciembre de 2007

La Progresión de las Técnicas de Aikido de lo Básico a lo Avanzado

por George Ledyard
Published Online
Traducido por Miguel C. Elias
Aikido Journal

Un área de mucha confusión en Aikido es la relacionada entre la práctica avanzada y las fundaciones básicas de la técnica. La visión de Morihei Ueshiba caminando imperturbablemente rodeado de atacantes quienes parecían imposibilitados de ponerle una mano encima, y en lugar de eso, saliendo despedidos en todas las direcciones con poco o ningún contacto físico, es una que la mayoría de los practicantes de Aikido ha visto.
Muy interesante es el punto que no existe un acuerdo general sobre qué O-Sensei, Fundador del Aikido, estaba actualmente realizando cuando mostró este Aikido al público. Entre los diferentes estilos de Aikido y entre un grupo aún mayor de maestros individuales, algunos quienes entrenaron directamente con el Fundador mismo, no existe prácticamente un terreno o punto de partida común cuando llega el tema de como el arte progresó de sus bases, las cuales varían de estilo en estilo o de maestro en maestro, a los niveles “Avanzados”.
Para algunos maestros, el Aikido “Avanzado” luce muy igual a los fundamentos básicos, simplemente más suave, con menos esfuerzo, corriendo como un arroyo, de una técnica a otra. Aquí, el Aikido “Avanzado” se identifica simplemente como un indicador de nivel alcanzado de relajación y menos esfuerzo por el practicante, lidiando con los ataques decididos iniciados por un compañero/oponente. Pero parecería que no existe un intento de estos maestros en la parte de “perder la forma” como el Fundador lo tenia claramente. Otros maestros parecen haber tomado al Morihei Ueshiba de los ochenta, representando la quinta esencia del Aikido y estos han intentado duplicar la ausencia de formas exhibida por el Fundador al final de su carrera. Para estos maestros existe mas importancia en ser sensitivo a cada cambio de energía, física o psíquica, del compañero, que en desarrollar una técnica con mucha fuerza. Algunos inclusive, denigran el poder del entrenamiento físico como lo contrario de la intención del Fundador.
El problema con ambas aproximaciones es que el Aikido para O-Sensei era un proceso, que el mismo continuó hasta su muerte. Aquellos que quieran tomar un tiempo particular de la vida del Fundador durante el cual él haya estado practicando Aikido “Ortodoxo” inevitablemente fallaran en entender los fundamentos en los cuales el Aikido de ese tiempo particular se basaba. Ellos también eligen ignorar todo lo desarrollado por el Fundador posterior a ese lapso de tiempo, lo cual para él representaba normalmente décadas de entrenamiento incesante. Al hacer esto, parece ser mas algo de preferencia personal que a tener alguna justificación particular.
Para aquellos que prefieren pasar directamente al final de la carrera del Fundador y hacer de sus avances y técnicas sin formas el modelo de su propia practica, están tratando de entender un arte sin conocer los cimientos sobre los cuales descansa todo el edificio. Algunos maestros sostienen que no tenemos que reinventar la rueda, que el Fundador realizo gran parte del trabajo para nosotros a manera de nosotros no tener que hacerlo. Este argumento podría sostenerse si existieran ejemplos de ello realmente. Pero Yo no he encontrado ninguna instancia en la cual alguien haya alcanzado un nivel etéreo en su técnica sin haber tenido una historia de duro entrenamiento físico. Atentar pasar sus conocimientos a sus estudiantes sin que ellos pasen por el mismo proceso, en mi propia experiencia ha fallado completamente. Esta razón parecería ser bastante obvia ya que toda idea, toda revelación que nos lleva a un salto cualitativo de nivel parece estar cimentadas en las bases firmes de los conocimientos logrados previamente. Yo mismo, no he visto a nadie saltando etapas y yendo directamente a los niveles más altos de entrenamiento sin antes haber pasado por los escalones precedentes necesarios del proceso de entrenamiento más mecánico y físico. Uniformemente, los intentos de hacerlo de esta manera que he encontrado han resultado en estudiantes cuyos movimientos son vacíos, perdiendo la necesaria intención de realizar una técnica a este nivel.
Así que, me gustaría tratar de resaltar lo que Yo constate (a este nivel de mi propio entrenamiento) como progresión natural de la técnica de lo básico, como dependiente de bases sólidas, entender la mecánica de cómo trabaja el cuerpo, como usar movimientos propios para desarrollar potencia y como unir esa potencia con la del otro sin conflictos, a lo avanzado dependiendo mas del aiki como interacción de lo físico con la energía, el lugar donde el cual el Cuerpo es afectado por la Mente y la técnica se va volviendo menos y menos física y más un factor de principios de acción. Esto debería permitir al estudiante de Aikido ver la interrelación entre los diferentes escalones de progresión desde lo básico a lo avanzado. Esta interrelación existe igualmente para las técnicas de cuerpo como para las de armas.
El primer nivel de entrenamiento se revela vía las técnicas estáticas. Este nivel de técnicas esta diseñado para entender la estructura. Cómo trabaja tu propio cuerpo, cómo trabaja el de tu compañero, cómo uno puede encontrar la potencia sin conflicto? Para pasar mas allá de este nivel, uno debe entender las mecánicas del arte, el componente del jiu-jutsu. Uno debe aprender a relajarse y entender la “geometría” básica de la técnica. En este entrenamiento se enfatiza al compañero a trabajar con la mayor potencia para así ganar experiencia referente a nuestro “entendimiento” a ser expresado vía nuestra técnica.
El siguiente nivel en la progresión (la cual es ejecutada a menudo en forma simultánea con el primer nivel) es la técnica hecha a partir del movimiento. Demandando una continúa atención en los conocimientos desarrollados con el entrenamiento estático, el entrenamiento con movimiento comienza a enseñar como la manipulación del espacio-distancia (ma-ai) y el tiempo (de-ai) pueden servir para neutralizar la potencia del atacante. Un “centro” fuerte desarrollado a través de la técnica estática ahora muestra ser movible, dondequiera que el practicante este, inclusive en movimiento, la sensación de “centro” es mantenida. En esta etapa el nage (defensor) permite al uke (atacante) iniciar el ataque y lo recibe usando sus movimientos para absorber el ataque. La energía del ataque es luego redireccionada dentro de la estructura del uke para técnica de llaves o dentro del balance del uke para técnica de proyección. Es en este estado en el que el estudiante comienza a trabajar con el concepto de cómo “guiar” la energía o atención del compañero. Guiar el Ki del oponente es un sello de las técnicas de Aikido.
Desde el punto de vista marcial, el nivel de entrenamiento anterior es limitado a que se cede considerable potencia al atacante permitiéndolo decidir como y cuando el ataque será ejecutado. Dando por hecho que todas las personas tienen un cierto tiempo de reacción entre el momento en que perciben algo y cuando pueden actuar en relación a lo que han visto (cerca de medio segundo para la mayoría de las personas), permitiendo al atacante tener la iniciativa como una mayor ventaja. Este es un problema ya que a) significa que del comienzo de la técnica, el nage estará actuando en forma reactiva al uke, y b) si el atacante elige utilizar menos de fuerza en una técnica, como un amague, el nage podrá mover al uke como él quiera y luego, repentinamente cambiar el ataque, haciendo por lo tanto el intento de técnica del nage incorrecta.
Así que, el siguiente nivel de técnicas, cambia a quien inicia. El nage no solo se limita a aceptar cualquier ataque generado por el uke. El utiliza sus mismos movimientos para comenzar a generar una reacción del atacante en el momento que el nage elija. Si el nage cierra el ma-ai (espacio) con el uke, él llegara a un punto en el que el uke DEBERA realizar el ataque o echarse para atrás. Fallar en lograr una de las dos opciones anteriores lo situara en una posición abierta para ser golpeado por el nage. Debido a que el nage es quien determinara cuando será el momento de cruzar el ma-ai y arribar al punto de “distancia crítica” el no tendrá “tiempo de reacción” debido a que conocerá cuando el uke reaccionara. Esto es muy importante en el desarrollo de una técnica marcial efectiva y debe ser procurada en forma cuidadosa. La diferencia entre este nivel y el anterior es que el nage permite al uke iniciar el ataque y luego el guía la “atención” del uke por sus propios movimientos. A este nivel de técnicas, él toma el control del “timing” (tiempo) manipulando el “espacio”, comenzando esta consideración como “rápido y lento” en técnica irrelevante. El practicante comienza a operar fuera de la zona temporal cuando comienza a controlar los factores asociados al tiempo y el espacio.
Lo que ha estado pasando en el desarrollo de estos “estados o niveles” es que la técnica ha pasado progresivamente en volverse menos física, con los principios de tiempo y espacio usados para pulir los movimientos del atacante. En el siguiente nivel de técnicas, no solo el nage inicia la acción para producir el movimiento del uke, sino que también utiliza la energía de su acción para guiar la respuesta que le dará el uke. En este nivel de practica el atacante termina siendo casi completamente reactivo al nage. El nage estará controlando su acción incluso antes que comience a ocurrir. La técnica aparenta ser más ligera y más energética antes que potente y física, pero aun así, es muy posible realizar las técnicas con mucha potencia si uno decide hacerlo así. Esto es alcanzado vía la manifestación de los principios conocidos como atemi waza en lugar de proyecciones o técnicas de llaves. Realmente una técnica marcial tremendamente explosiva y efectiva puede ser generada de esta forma. En la práctica, por supuesto, el atemi waza no es utilizado para infringir daño o crear alguna disfunción física. En su lugar, es una forma de usar potencialmente una energía explosiva para generar la respuesta del uke. Esto puede servir para distraerlo y mover su energía del lugar del cuerpo donde la técnica se este aplicando (como en una llave) o puede ser usado para llamar su atención para realizar una entrada, sin ser golpeado. En otras palabras, a este nivel de técnicas, atemi es a acerca de dirigir la atención o la energía del compañero hacia lo que uno desea y fuera de lo que uno no desea.
Cuando este nivel de técnicas es alcanzado, usualmente ya no hay contacto físico que precedan a una “proyección”. Una técnica que ha sido, en su forma básica, una técnica de agarre de alguna forma, ahora será coordinada en forma que no existirá ningún agarre. Podría o no haber intención de efectuar un agarre, pero la técnica ahora se ha movido a un nivel energético en la cual el ataque del compañero es absorbido por el nage, guiando la atención del atacante produciendo un movimiento de apertura (suki), el nage ganara el control del centro del atacante sin manipulación física sino creando una situación en la que el atacante se moverá en la forma deseada por el nage. Un atemi que será puesto en el espacio que el uke necesita ocupar en orden a completar su ataque, resultará en que el uke romperá su propio balance a manera de escapar antes de ser golpeado. Cuando este nivel de técnica es alcanzado, la técnica es manejada vía principios puros en lugar de factores físicos que producían la misma técnica a niveles básicos. Una técnica como ryote-tori tenchi-nage ejemplifica el principio de la “separación” de la energía del compañero (física o mental). Cuando llega finalmente a su expresión energética ya no requiera un ataque ryote-tori. En efecto, tenchi-nage puede ser efectuado contra una patada de frente por ejemplo. El éxito del tenchi esta en como la atención del atacante será separado de lo que se percibe como blanco y redireccionado permitiendo al nage su entrada sin ser golpeado. Pero la manifestación del “principio de separación” no puede ser alcanzado sin el conocimiento de la ejecución física básica de la técnica. No puede ser saltada.
Cuando la técnica es presentada a los estudiantes de esta forma, con variaciones progresivas desde lo elemental, versiones físicas y estáticas, a las versiones avanzadas, energéticas, como el fluir del agua, puede asistir a los estudiantes en entender al mismo tiempo de donde vienen las técnicas y a donde podrían llegar con su desarrollo. Esto puede servir también para desmitificar la energética de las técnicas avanzadas desde sus principios ya que pueden ser desglosadas y enseñadas y pueden mostrar claramente cuales elementos son esenciales en proveer los cimientos de una técnica, antes de que versiones mas sofisticadas sean alcanzadas. Cada nivel asume el entendimiento del nivel anterior. Usando este tipo de metodología quizás puedan existir más estudiantes quienes llegaran a los niveles mas altos de este arte creado para nosotros por el Fundador del Aikido.

Acerca de las Vías Marciales de Japón – El entrenamiento de la unificación del cuerpo y espíritu

por Moritaka Ueshiba
Aiki News #42 (November 1981)
Traducido por Angye Alejandra Bahena García
Aikido Journal

Cuando visito los dojos bujutsu (artes marciales) en diferentes lugares, me doy cuenta de que muy pocos tienen un templo para los “Kami”. Esto es especialmente verdadero en los dojos de las escuelas. Parece que la gente moderna piensa que puede dominar el budo y entrenar en el bujutsu simplemente moviendo el cuerpo. Cuando observo a las personas que han estado entrenando con esa actitud, y logro practicar intensamente con ellos, siento una clase de pena inexpresable acompañada de una gran responsabilidad. Un “dojo” es, como lo indican los caracteres con los que se escribe esta palabra, un lugar de entrenamiento (jo) de la “vía” (do o michi). Actualmente “dojo” es sustituido por el término “fábricas”. A manera de analogía, a pesar de los grandes avances en las ciencias y del progreso en la fabricación de aleaciones y en la fundición de metales, las espadas modernas no tienen comparación con las famosas espadas del pasado. Alcanzar un acuerdo entre la ciencia moderna y las creencias del antiguo Shinto, constituye el gran camino que representa nuestro objetivo. Me gustaría comprender la esencia del budo a través de este espíritu de acuerdo entre lo antiguo y lo nuevo.
No es el filo de la espada lo que corta primero, sino el sakki, el deseo sanguinario de matar lo que lo impulsa desde la mente del atacante antes de que la misma espada se mueva. Yagyu Taiima no Kami, el famoso profesor del tercer Tokugawa Shogun, Yagyu caminaba un día en un jardín, seguido por un sirviente que fue asaltado repentinamente por un pensamiento: “Si lo atacará ahora, incluso un gran espadachín como mi maestro sería sin duda, incapaz de resistir…” En ese instante, como si hubiera sido controlado por una gran ansiedad, Tajima no Kami regresó precipitadamente a sus aposentos y habló con su sirviente “Mientras caminaba en el jardín, sentí que el sakki me atacaba. Pero nadie excepto tu estaba presente. Lo que temo es el sakki en donde ningún enemigo es aparente”.
La esencia del hacer la guerra es prever el plan del enemigo de batalla. Mientras la flota Báltica de la Russia Zarista se acerca a nuestras aguas nacionales, las dificultades que enfrentaron el Almirante Togo y sus hombres, incluyendo a Shimamura y Akiyama, fueron más grandes de lo que las palabras puedan expresar. Casi no pudieron comer ni dormir. Su único pensamiento era suplicar a los “kami” para que preservaran su nación imperial. Un día, el Capitán Akiyama tuvo una visión de la flota Báltica en una sola línea dirigiéndose al norte en los estrechos de Tsushima entre Japón occidental y la península coreana. Cuando éste, relató su sueño a su oficial en jefe, el almirante Togo se dio cuenta de que la flota enemiga pasaría de esa forma y fue así que se decidió el plan de batalla de nuestra nación (en base a ese sueño). Cualquiera que haya tenido alguna vez una experiencia con inspiración admitiría de buena gana que tales cosas ocurren.
Otro ejemplo, después de haber alcanzado cierto nivel de entrenamiento en “el camino de la espada”, se puede sentir la intención de cortar del enemigo antes de que el filo empiece a atravesar hacia abajo. Yo mismo, tuve la experiencia de ver “la imagen de una bala” blanca de una pulgada, y de escuchar su zumbido como si volara hacia mi antes de que fuera realmente disparada, (una experiencia que) desafía completamente al tiempo y espacio. Sin embargo, en el budo genuino, la simple previsión del plan del enemigo no es suficiente. El equipar el yo-interno con el poder de mover al enemigo de acuerdo con la voluntad propia es la verdadera “Vía de los Dioses (kami no michi). Esto es solo la punta del iceberg de la experiencia inspiradora en relación al budo. Si los aprendices de bujutsu de esta pudieran darse cuenta de que ellos deben honrar el “kami” y entrenar en la unidad del espíritu y del cuerpo, se sorprenderían con su propio progreso.

Kenji Ushiro

por Ikuko Kimura
Published Online
Traducido por Luis A. Henriquez
Aikido Journal

Keiko significa aprender a usar realmente lo que tienes dentro de ti”
Entrenamiento en Bujutsu (artes marciales) es fundamentalmente un proceso para descubrir cómo responder a situaciones críticas, y más específicamente a situaciones en las cuales se es atacado por un oponente o contrario. Cómo se puede salir de este peligro? Cómo se sale de esta crisis? Cómo nos protegemos del ataque de uno o varios oponentes? Estas son las principales preguntas que nos debemos hacer en cualquier tipo de entrenamiento en Bujutsu. Estoy seguro de que esta es la forma en que siempre ha sido, y en este sentido no hay mucha diferencia entre el Bujutusu de ahora con el del pasado. A traves del tiempo, las distintas técnicas y técnicas secretas (gokui) que han nacido de este tipo de entrenamiento han sido compiladas, y a la vez estas compilaciones del conocimiento fisiológico gradualmente llevaron a la creación del kata (formas) que se practica actualmente.
La pregunta que debemos hacernos hoy, es qué tipo de enfoque y pensamiento debemos adoptar para poder aprender las katas y todo lo que éstas tienen que ofrecernos.
Yo personalmente he encontrado que es mejor ver la kata, no simplemente como formas que deben aprenderse, sino como “herramientas” que se usan para estudiar cómo enfrentarse a situaciones críticas, y más específicamente, cómo mantenerse fuera de peligro en estas situaciones.
En otras palabras, el entrenamiento en Bujutsu no se trata en aprender solamente técnicas, sino también en el aprender a utilizar las técnicas que se encuentran en las katas que practicamos, pero lo más importante es desarrollar la “aplicación” de las técnicas contenidas en las katas.
Los cinco pasos hacia la aplicación de las técnicas.
Por favor, explíquenos un poco mejor la diferencia entre la palabra “técnica” y la idea de “aplicación” versus la “no-aplicación” de las técnicas.
Las personas muy a menudo tratan de aprender a ser expertos en el combate aprendiendo de la siguiente forma: “contra este tipo de ataque, yo puedo hacer esto….si me atacan de esta otra manera, yo haré esto otro”. No hay razón en aprender las técnicas en esta manera, a menos que puedas entender la técnica o técnicas a la cual te refieres. A lo que llamamos “técnica” se entiende mejor como un “proceso”. Esta es una idea en la que quiero enfatizar porque el entrenamiento enfocado en técnicas como respuestas a fórmulas, en vez de “procesos a ser descubiertos” usualmente resulta en una aplicación no real.
Con esto en mente, permítame exponerle una serie de cinco pasos o etapas que pueden servir como un estándard para conseguir la “aplicación” de las técnicas, y esto significa tener la habilidad de saber aplicar lo que se ha aprendido.
El primer paso es “hatsu-go, gan-go” el cual significa generar fuerza desde dentro de la fuerza. El segundo paso es “hatsu-go, gan-ju” que significa generar fuerza desde dentro de la suavidad. El tercer paso es “hatsu-ju, gan-go” el cual significa generar suavidad desde dentro de la fuerza. El cuarto paso es “hatsu-ju, gan-ju”, o generar suavidad desde dentro de la suavidad. Y finalmente, el quinto y último paso es “hakkigan-goju”, o generar fuerza y suavidad desde dentro del Ki, lo que involucra una manipulación de energías.
Ya empiezo a entender lo que Ud. ha explicado, pero quisiera que me explicara más a fondo…
En otras palabras, en el primer nivel, hatsugo-gango todo se refiere a fuerza y rigidez, ambos dentro y afuera. Por ejemplo, cuando un oponente te ataca, se reacciona bloqueando el golpe con fuerza y rigidez. Por supuesto, usualmente esto resulta en un choque y por consiguiente esto tiende a que haya dolor en ambos contrincantes. Así pues, el usar una técnica fuerte, nos lleva al primer nivel o nivel de ténicas rígidas.
En el segundo nivel, hatsugo-ganju, se debe tomar la iniciativa hacia un alcance más suave y flexible, por ejemplo, evadiendo la técnica de tu oponente y usando varios tipos de movimientos de cambio de dirección. En el exterior todavía existe una fuerte rigidez, pero en el interior se esta desarollando una cierta suavidad y flexibilidad.
En el tercer nivel, hatsuju-gango, se tiene fuerza por dentro, pero esto se convierte en suavidad y flexibilidad en el exterior. Las técnicas de proyección son un buen ejemplo de esto; se recibe y se detiene el ataque del oponente con una técnica rígida de bloqueo, pero luego en el siguiente instante el movimiento se cambia de dirección y se realiza una proyección, lo cual es necesariamente un movimiento más manejable y más flexible.
En el cuarto nivel, hatsuju-ganju, se debe reaccionar al ataque del oponente con suavidad, flexibilidad y se debe mantener ese estado durante la respuesta y el contra-ataque. Desde el comienzo hasta el final se debe sentir que el oponente esta siendo muy levemente tocado.
Finalmente, en el quinto y último nivel de hakki-gangoju, el oponente intenta atacar, pero tú analizas, paras, o controlas usando el Ki (energia, intención).
Los dos primeros niveles los considero técnica de aprendiz; el tercer y cuarto son el nivel intermedio y el quinto nivel es el avanzado, o en japonés okuden.
Así, para poder avanzar a través de estos niveles, debes entrenar con tu compañero, debes poder recibir golpes y aprender a través de la experiencia. Trabajar a través de los cinco niveles que he descrito es como aprender a montar bicicleta. Al inicio intentas mantenerte en dos ruedas, el cual es el primer nivel. En esta etapa tienes que seguir las katas para poder perfeccionarte, porque las katas proporcionan la clave necesaria para moverse al siguiente nivel. Esto no quiere decir que las katas se vuelvan innecesarias una vez que alcances el segundo nivel. El alcanzar el segundo nivel no significa que debas olvidar lo que aprendiste en el primer nivel, es por esa razón que se necesitan las katas para continuar puliendo las habilidades aprendidas en el primer nivel. Esto es particularmente verdad una vez que alcanzas el quinto nivel, porque la ejecucion de técnicas va a ser vista como un resultado de todo lo que has aprendido hasta el cuarto nivel.
Como he dicho, esto no necesariamente es un progreso en orden lógico, y a través de todo el proceso, el desempeño es basado únicamente en el criterio de aplicación, esto es, si puedes o no puedes utilizar lo que sabes en artes marciales.
Verificando la Universalidad cuando se establece una teoría.
Ud. ha mencionado que el proceso que ha explicado está fuera del dominio de la lógica y la teoría. Se debe esto a que la lógica y la teoría vienen después, como algo que se debe tratar o hablar solamente después que la verdadera habilidad (o la falta de ésta) se ha confirmado?
Así es. Por ejemplo, si estás pensando en tratar de caminar sobre el agua, probablemente puedes hacer algunos planteamientos basados en una teoría, como que todo lo que tienes que hacer es avanzar con tu pie trasero antes que tu pie delantero toque el agua; en realidad esto no se puede hacer, no interesa cual sea la teoría. Para formular una teoría válida, se debe considerar la aplicación actual, esto quiere decir, si realmente puedes o no puedes usar lo que sabes. Sólo desde esa perspectiva puedes iniciar a formar una verdadera teoría. Sólo desde allí puedes preguntarte, “Está bien, realmente yo puedo hacer esto; ahora, por qué soy capaz de hacerlo?
Muy a menudo la gente habla del llamado “doble camino entre el aprendizaje y las artes marciales”. Yo pienso que esto se refiere a lo que se conoce como “filosofía aplicada”, en otras palabras es la filosofía que se refiere a la experiencia en actividades y acciones verdaderas. Por supuesto que la filosofía requiere de enseñanzas y teorías. En este sentido, las palabras que he usado para describir el progreso en cinco niveles son una “teoría” que en este caso pienso que están subestimadas por una realidad, pero son acertadas en términos de describir cómo se llega al progreso y perfeccionamiento en las artes marciales. Estás son palabras que han salido de la experiencia, y pienso que sirven como un buen inicio para describir el nivel actual de cada practicante y para determinar qué tipo de entrenamiento se necesita para alcanzar el siguiente nivel.
Pero, por qué Ud ha esperado tanto tiempo para explicar estos cinco pasos? (K. Ushiro se ríe)
Muchas personas me han preguntado eso! (K. Ushiro se ríe). Permítame explicar esto en mi propia defensa; en primer lugar se debe tener experiencia en el combate, y luego toma tiempo el formar palabras y contruir teorías en torno a esas experiencias. También está el hecho de que yo he pasado mucho tiempo experimentando y verificando la universalidad de estas experiencias desde cada ángulo posible. Aún, si tienes la destreza en tu cuerpo, todavía tienes que hacer mucho trabajo de revalidación si deseas convertir ese trabajo en teoría. Recientemente he llegado a un buen punto en el que he podido organizar mis vivencias en el proceso, he llegado al final de una fase en mi análisis, así que, es hasta ahora que he llegado a un buen momento que me permite poder compartir mis hallazgos con el público.
Es de mucha ayuda que te hayan enseñado, por ejemplo, que cuando te caes debes poner tus manos para no golpearte, pero en realidad nunca se sabe si tus manos van a trabajar como tu piensas que deben hacerlo, esto es de acuerdo a lo que tu cerebro conoce. En la mente se escucha la reacción y entonces, haces planes para poner tus manos la próxima vez que te caigas, pero estos planes son sólo teóricos y estos no necesariamente corresponden a lo que pueda suceder. Si alguna vez te fueras a caer, todo lo que debes hacer es dejar que tu cuerpo reaccione, y esa reacción resulta en lo que tu cuerpo recuerda. Luego puedes expresar ese resultado en palabras —esto es, como una teoría- y entonces se debe regresar a trabajar en esa teoría verificando todos los aspectos posibles, y se debe estar seguro que esto es tan verdadero como se piensa que es.
El Valor en acción viene antes que la confianza.
El ejemplo de caerse es realmente demasiado simple, porque dejarse caer es algo que se puede intentar en solitario, mientras que las artes marciales siempre involucran a una o más personas y por esta razón son más complicadas.
Por ejemplo, qué harías si tu oponente inesperadamente te ataca con un poderoso ataque? Responderías a este ataque chocando con igual ferocidad? O de alguna manera absorbes el ataque? O dejas fluir el ataque? O utilizas algún otro medio más avanzado, por ejemplo, prediciendo el ataque y controlándolo utilizando Ki? La manera como respondes a un verdadero ataque depende de lo que tu cuerpo recuerda, lo cual depende del nivel de entrenamiento que alcanzaste, o en otras palabras al grado de aplicación que hayas logrado obtener.
Si, por ejemplo, tu cuerpo esta equipado para “comprender” toda la información sobre el oponente al momento del contacto y utiliza esto para formular una respuesta rápida al ataque, entonces yo pienso que puedes decir que tienes “aplicación”. En ese momento puedes iniciar bunkai kumite, (combate paso a paso) el cual se basa en las katas como sistema para poder obtener respuesta de la aplicación que ya hayas alcanzado.
Las técnicas que usan las katas como punto inicial pueden desarrollarse ilimitadamente. Ilimitabilidad [en términos de lo que podría suceder] es definitivamente una característica de cualquier combate real. Usted empieza su aprendizaje preocupándose específicamente de determinados aspectos tales como cuándo, dónde y el momento para girar las caderas, pero lo que realmente se quiere aprender no es en última instancia esos determinados aspectos, sino la habilidad de sentir dentro de tu propio cuerpo algo como un avión, o una línea, o un punto, o en otras palabras un núcleo en donde todos tus movimientos fluyen. Así, una vez que ese sentido se haya desvanecido de tu conciencia, es en ese momento, que se ha llegado a desarrollar un cuerpo fundamentalmente completo en técnica marcial.
Zaha Sensei entrenó en un ambiente auténtico y verdadero desde el inicio, así que nunca tuvo una pérdida en su proceso de aprendizaje y yo pienso que desde muy temprano su cuerpo se transforrmó en una parte fundamental. En contraste, la mayor parte de nosotros tenemos que iniciar pensando en movimientos básicos tales como el giro de las caderas, entre otros movimientos, lo cual en algunos casos es empezar con las condiciones equivocadas. Tanto como sea posible necesitamos ponernos de vuelta en el carril correcto, dentro del camino que nos guiará hacia la verdadera forma.
Inlcluso si reconocemos nuestros propios errores, lo cual es muy difícil de hacer, esto requiere valor en varias maneras. Con el valor viene acción y cambio. Esos cambios te transforman, llevando eventualmente a que surja una gran confianza.
Lo importante es que tengas el valor para situarte en el verdadero camino. Es en este momento que la “integración lateral” inicia. Esto también se transforma en energía que proyectas al mundo exterior.
En estos días es muy importante tener el valor para decidir lo que es correcto, lo que es verdadero. Yo siento que a medida que entramos a este nuevo siglo y a medida que nos movemos dentro del mundo, una de las cosas que más necesitamos es acción respaldada por el valor.
Tan lejos como el aprendizaje en las artes marciales vaya, debemos enfocarnos en lo que tiene aplicación. Las personas que se enfocan incondicionalmente en esa dirección progresarán y mejorarán. Estas personas también necesitan tener fé en la aplicación de lo que han aprendido. Personas como éstas tendrán un sobresaliente progreso. Aún más, aprender verdaderamente la aplicación en las artes marciales, siembra la semilla de confianza en ti mismo, y cuando esas semillas brotan, llevan entonces a cambios en el comportamiento y se crece en forma positiva. Yo pienso que esta variedad de elementos es importante especialmente en la formación de niños.
Aprende en el cuerpo, no en la mente.
Déjeme recordar uno de sus puntos inciales. Ud dijo que lo que es importante no es necesariamente la “técnica”, sino si eres o no eres capaz de aplicar lo que aprendiste. Todavía no estoy completamente seguro de haber entendido debidamente lo que Ud quiere decir con esto…
Visualiza una bicicleta. Una persona que sabe usar la bicicleta puede usarla para ir a la tienda cercana para comprar algo. Pero para alguien que no sabe cómo montarla, la existencia de una bicicleta no tiene sentido; asi que esta persona prefiere ir caminando, o usar el automóvil, o cualquier otro medio. La persona que sí sabe montarla la utiliza cuando tiene necesidad, naturalmente y en realidad sin pensar que sabe montarla, solamente porque sabe cómo usarla y porque está disponible. Ahora, lo que conocemos como “técnicas” (giho) realmente son procesos, como he mencionado, las cuales en este ejemplo son una analogía al hecho de practicar a montar una bicicleta. Por otro lado, aplicación se entiende como “verdaderamente montar la bicicleta”, así como también a todas esas otras actividades que podemos realizar usando la bicicleta.
Aproximadamente 500 Kilómetros al norte de San Francisco, California se encuentra un pueblo llamado Redding. Una vez realicé un viaje hacia ese lugar por invitación de mi amigo Uchigaki Sensei. Es la misma distancia aproximadamente entre Tokyo y Osaka, por esa razón alquile un automóvil y consumí todo un día manejando ida y vuelta. A los estadounidenses que les he contado que hice este viaje encuentran esta historia divertida; ellos me han explicado que en los Estados Unidos cuando se quiere viajar una distancia como esta uno usualmente toma un avión comercial, o una avioneta, si es que hay disponibles. En los Estados Unidos las personas utilizan el transporte aéreo tanto como nosotros los japoneses utilizamos autos privados, buses, y trenes. Existe un mayor significado en viajar dependiendo de las distancias, por ejemplo, por avión, por automóvil, en bicicleta, entre otros. Las personas en los Estados Unidos consideran 500 Kilómetros la misma distancia que se consideran 80 Kilómetros o más en Japón. Simplemente no se me ocurrió que habrían aviones viajando entre dos ciudades que yo creí (erróneamente) que estarían a la misma distancia como es el caso de Osaka y Tokyo. Así que asumí que podría ir manejando 500 Kilómetros manejando hasta Redding y luego regresar.
“Medios de efectividad” es lo que llamamos “técnicas” y, “aplicaciones” significa cómo utilizamos esas técnicas, las cuales en situaciones reales tienen variaciones dependiendo del sentido o reacción de la persona que las ejecuta.
Entre las personas que vienen a entrenar conmigo o los que observan algunas de mis clases, aquelllos interesados en perfeccionar sus habilidades en el full-contact tienden a estar más interesados en el combate, así que usualmente al inicio realizamos algo de esto. Desde el comienzo estas personas tienen la tendencia a utilizar una gran cantidad de patadas al área baja. En contraste, aquellos con un tendencia teórica pasan una gran cantidad de tiempo hablando sobre si el oponente hace esto o lo otro entonces ellos harán esto y lo otro. En muchos casos esto último lleva a que sólo se cubran algunas “situaciones” y esto provoca que estas personas no puedan tener un conocimiento de todo el contexto. Mi consejo para ellos es que no usen tanto sus mentes y se concentren en aprender con sus cuerpos.
En otras palabras, ellos en realidad no pueden manejar la bicicleta…
Si la organización o sistema al que estas personas pertenecen es grande, algunas veces ellos tienen problemas en dejar de pensar de esta manera. Estas personas podrían quedar sorprendidas cuando descubran que algo está mal en esto, así que éstas personas empiezan a preocuparse. Algo que he obervado aún en esos que vienen buscando mejorar sus habilidades en el combate, es que ellos tienen la tendencia a ver el lugar de donde vienen cómo el más fuerte. Algunos hasta abandonan sus organizaciones o emblemas o lo que esté en sus uniformes impreso, otros vienen donde mi sólo con su cinturón negro. Para mí esto representa más que un gran deseo por aprender, y ellos parecen no realizar que han perdido hasta el sentido de cortesía. Por supuesto, hay otros que son campeones con un alto nivel técnico, quienes hacen un gran esfuerzo en ser respetuosos, modestos y muestran una actitud sincera. Probablemente la habilidad para poder poseer esa actitud es en parte lo que les permitió convertirlos en campeones.
Qué es Resistencia?
En budo se entrena para ser capaces de afrontar cualquier situación, y todos los días de ser capaces de mantener un sentido de calma y serenidad bajo todo tipo de condiciones. Al preguntarnos “qué es resistencia? primero debemos preguntarnos “en relación a qué debemos considerarnos fuertes o débiles?” Ganar en el ring es ciertamente una posibilidad; pero lo que pienso es que es más importante ganar sobre ti mismo, estar capacitado de protegerte a ti mismo, y comportarte en el sentido de que obtengas confianza y el respeto de las personas.
La gerencia en diversas corporaciones o empresas suelen usar frases como la siguiente “nuestros empleados son lo más importante para nosotros”; pero estas mismas corporaciones están envueltas en lo que llaman “reestructuración” (inevitablemente incluyendo los despidos). Han tenido que hacer esto para poder sobrevivir. Pero me pregunto si esto en realidad en una verdadera propuesta gerencial para proteger a la empresa, lo cual es lo mismo que proteger a los empleados, y ser capaces de cambiar y crecer para alcanzar nuevas realidades. El mundo siempre está cambiando, es por esto que las grandes corporaciones deben tener la destreza de poder cambiar. Las empresas en las cuales los empleados tienen conocimiento de estas realidades, hace que la compañía posea el coraje para moverse hacia adelante como una fuerza comprometida a la realidad, estas son las compañías que prosperarán.
Me parece a mí que para alcanzar resultados reales, en primer lugar, tienes que saber utilizar a tu gente efectivamente, y que los despidos, como una herramienta en la reestructuración de una empresa, son algo totalmente opuesto en la obtención de resultados.
Yo pienso que es así. Reestructuración es sólo una idea, un concepto, no el final, y simplemente teniendo idea de que “la reestructuración es lo que se necesita” tiene poco significado. Para que tenga significado, tiene que tener aplicación, que se pueda utilizar en una situación real y que se puedan obtener buenos resultados. Es lo mismo en Karate. No tiene mucho sentido aprender Karate en forma intelectual; cualquier teoría llegará naturalmente a través de los resultados que se logren. Yo pienso que se debe tener este tipo de relación entre la práctica (entrenamiento) y la teoría.
Aquellos que desarrollen la “Aplicación” son los mejores maestros.
Imagina que alguien te ataca con una vara dirijiendo el ataque a tu parte baja. Hay distintas maneras de manipular este ataque. Pero conociendo solamente esas distintas maneras no ayuda, porque la aplicación no necesariamente sigue que se tenga el conocimiento. Debemos ser capaces de preguntarnos a nosotros mismos, “Adelante, atácame desde cualquier dirección que se te ocurra” y luego debes ser capaz de manejar este ataque desde donde venga y hacia donde vaya. Algo menos que esto es inefectivo. Si vas a ser un maestro, no es suficiente que seas capaz de realizar solamente la kata; tienes que ser capaz de usar decididamente lo que está en la kata para enfrentar los oponentes que puedan acercarse desde cualquier dirección. Alguien que hace esto puede ser llamado maestro.
Puedes ver tu forma externa sólo con mirarte en un espejo; pero lo que hay dentro de ti, lo que está realmente dentro de tu mente, sale a la luz cuando empiezas a enseñar.
Al comienzo se empieza “aprendiendo” Después se avanza hacia el “aprender mediante la enseñanza”. Y solamente cuando avanzas esa etapa te puedes considerar que “eres capaz de enseñar”. Esto es exactamente lo que quiere decir la expresión shu-ha-ri (mantener — romper — separar). Probablemente esto es algo que suele suceder cuando se alcanza la edad de entre 40 a 50 años. Yo pienso que es muy importante aprender de un maestro que haya alcanzado este nivel, porque aprender artes marciales de alguien que esté “incompleto” puede inadvertidamente llevarte por el camino equivocado y luego será difícil volver de nuevo al camino correcto.
Por “completo” lo que quiero decir es que debes iniciar tu entrenamiento con alguien que pueda manejar la bicicleta y quien haya tenido experiencia práctica en las artes marciales. Luego, una vez que hayas podido montarte en la bicicleta por ti solo, entonces puedes iniciar a improvisar. Y cuando entrenas con otras personas que hayan aprendido a manejar la bicicleta, esto lleva a un mejor desarrollo —y finalmente a desarrollar la aplicación técnica

Un dilema aplazado: una identidad denegada y desestimada

por Minoru J. Shibata
Published Online
Traducido por Fernando Gómez
Aikido Journal
A mediados del siglo XX, Morihei Ueshiba O-Sensei presentó un arte marcial que es único hasta la actualidad. Hay muchos testigos que actualmente viven en todo el mundo que estuvieron allí, mirándole, oyendo lo que decía y que le tocaron físicamente. Además hay una cantidad significativa de grabaciones y anécdotas históricas sobre su arte, del mismo modo que hay prácticas y seminarios que han ido proliferando durante muchos años que parecen estar directamente relacionados con lo que él fundó. Sin embargo, encontramos poca, si acaso, evidencia de alguien, incluso entre aquellos que estaban más próximos a él, que haya entendido su aikido con certeza y claridad, por lo que parece no existir transmisión reconocida de su arte. Por lo tanto, el aikido que él fundó todavía permanece único y el legado de lo que fundó existe como una serie redundante de tentativas, interpretaciones invalidadas de su idea original - o algunos otros conceptos y prácticas de “aikido”.
Esta otra vertiente de un arte común con un objetivo singular ha sido esencialmente una combinación de tentativas de interpretaciones que han sumado a una repetición de monotonías. La singularidad del arte parece haber sido desestimada por aquellos que han estado concentrando las crónicas de aikido en una forma ambigua del arte. Más aún, se supone que este arte ha sido fundado por una persona legendaria, idiosincrásica, de múltiples facetas que ha expandido el arte(s) que aprendió de otros. Estos esfuerzos y pensamientos han recuperado claramente lo que O-Sensei había desechado totalmente. Obviamente las muchas interpretaciones de su arte han dado lugar a los paradigmas de las artes marciales que precedían a su aikido y han sido sustituidos y ajustados a la mentalidad contemporánea. Esto sólo ha ampliado en mayor medida la separación respecto de su aikido. Esta discontinuidad ha resultado en una parodia que ha retardado más la evolución y desarrollo del arte marcial de O Sensei. Las referencias a las técnicas con nociones absurdas como estilos “suaves o duros” o incluso aikido de “clase mundial” tan solo han añadido una vuelta de tuerca más para hacer borroso lo que ha sido vago desde el principio. De algún modo, el “aikido” se ha convertido en una terminología para una diversidad colectiva de interpretaciones bienintencionadas en lugar de una diversidad de algo original.
Las frecuentes reuniones de cursos y seminarios para todos los grupos y estilos parece reforzar lo que ya existe pero no se dirige hacia lo que se ha perdido. El esfuerzo loable de compartir información y formas de entrenamiento a través de la amistad y apertura es una sobre simplificación que no está enfocada al verdadero problema - como en un cuento popular familiar del emperador sin ropas; es decir el aikido sin ningún O-Sensei. La mayoría de las prácticas, si no todas, son interpretaciones de una idea del “aikido” sin ninguna validación de que sean el aikido de O-Sensei. No hay claridad alguna en cuanto a la integración de la estrategia y disciplina marcial y filosófica que se supone que deberían expresar, satisfacer o personificar estas prácticas. Su identidad está escondida o no existe y ,por lo tanto, puede ser cualquier cosa. Paradójicamente, sin la presencia del aikido de O-Sensei, el probable potencial que se ha visto permanece limitado para cualquier otro aikido que no sea el suyo.
Muchos de nosotros sólo podemos imaginar indirectamente a través de documentos pasados y anécdotas de O-Sensei, su personalidad y carácter y su relación con aquellos que estaban más próximos a él, incluida su familia. Existe poca evidencia entre los practicantes de aikido, religiosos o no, que hayan aceptado su espiritualidad como la esencia primaria dentro del paradigma de su aikido. Escuchamos o leemos más acerca de su idiosincrasia que de su espiritualidad.
Debemos concluir que hasta ahora ha existido una variedad de respuestas a la pregunta, “¿Qué es el aikido?” La mayoría de los análisis, si no todos, han formulado la pregunta equivocada. La pregunta obligada desde el principio debía haber sido, “¿Qué es el aikido de O-Sensei?” No se trata de su relación con otras artes marciales o su relación con otras personas. Se trata de su creación y su singularidad y del entendimiento de lo que él creó. El problema continúa estando oculto por la vaguedad y ambigüedad implícitas de las prácticas que son descritas por una abundancia de retórica eufemística y racionalizaciones intelectuales.
Lo que le ocurrió al aikido de O-Sensei raramente se discute y la probable complicidad que provocó sobre las prácticas actuales es fascinante en si misma. Lo que existe puede ser descrito como diferentes formas de arte de culto sin los cimientos del nuevo paradigma del fundador. El alcance de esta actividad, como se percibe y practica hoy en día, ha producido una cantidad desenfrenada de actividad, y esta práctica ha tomado vida propia y se ha unido a otras formas de entretenimiento. Parece ser practicado como un arte de muchas formas y filosofías, compartiendo la misma etiqueta y una sabiduría convencional similar. Esta sabiduría incluye la relación retórica de que el aikido que se practica sigue la misma filosofía y es funcionalmente igual al aikido desarrollado por O-Sensei. Este es un mito persuasivo, dado que tal presunción comparte muchas de las características familiares y de linaje común a las formas y estrategias de las antiguas artes marciales del pasado – pero no coinciden con su aikido. La esencia de la tesis de este artículo es que O-Sensei comprendió la futilidad de tales ataduras con respecto a lo que él buscó. Son los intérpretes, los marcialmente y/o intelectualmente orientados, quienes han seguido negando el nacimiento virgen de su aikido. El mantenimiento de los lazos antiguos y familiares pareció y fue coherente y adecuado a ojos de los primeros interpretes. También les daba las convenientes seudo encrucijadas a seguir por la mayoría de los practicantes. Pero el aikido de O-Sensei no era una continuación y extensión de lo antiguo y tenía una marcada discontinuidad con el pasado marcial y los conceptos filosóficos. El problema entonces y ahora es la necesidad de explorar lo que aún no nos resulta familiar, lo que el reveló como el nuevo “bu” impulsado espiritualmente. Su trascendencia a la realidad espiritual y universal constituyeron los fundamentos de los paradigmas que el demostró.
Esta tesis retorna a la disyuntiva que separó el aikido que hoy prevalece del aikido de O-Sensei, y retrocede hasta dicha encrucijada y llega al ámbito donde el introdujo su aikido. Lo más probable es que este camino fuera ocultado o marginado debido a que no existían huellas familiares y confortadoras de prácticas pasadas. El ámbito original que O-Sensei creó de cara a nuestra participación en la evolución ulterior de su aikido parece haber sido abandonado prematuramente como una ecuación parcialmente resuelta porque su realidad no pudo ser visualizada. Entre las muchas traducciones y datos dispersos, quizás existen suficientes detalles y continuidad para conectar los puntos metafóricos con la realidad de su aikido. No obstante, no tenemos que buscar o esperar que reaparezca ese ámbito; nunca ha desaparecido y no desaparecerá de las mentes de los individuos que lo han visto o sentido. O-Sensei probó su existencia y esperó nuestra llegada allí. Hay testigos que le han oído decir repetidamente a sus estudiantes jóvenes que un día entenderían lo que “este viejo” les estaba contando y demostrando. En el pasado, los participantes sólo vieron una imagen virtual de él fuera de este ámbito, aunque ellos estuvieran en la misma habitación o dojo, a poca distancia de él.
Mientras estuvo vivo, sus progresos estaban todavía dinámicamente en marcha, como repetidamente intentó hacer ver a sus estudiantes. Por retrospección está abrumadoramente claro que el futuro de su aikido dependió de cuanta comprensión y madurez espiritual pudieron asimilar los individuos en las culturas y generaciones de su época. La madurez, en particular, requería la capacidad de seguir su imperativo para liberarse completamente de las ligaduras de las prácticas pasadas, ya fuesen filosofías, rituales u otras ideas preferidas. Las actitudes contemporáneas marciales y culturales de los individuos eran una distracción o restricción notables para un mayor esclarecimiento y purificación (Misogi) así como para una mejor contemplación y meditación. En cambio, la atención habitualmente se distraía en los cálculos de técnicas efectivas a invencibles, pero sólo imaginables. Este hábito adictivo, el cual fue completamente eliminado en la nueva práctica, permanece claramente presente y visible en el legado del aikido contemporáneo.
Tras más de medio siglo, hay casi tantas razones mundanas como número de practicantes para evitar los cambios cruciales. De hecho, los individuos pueden alcanzarlo quitándose los grilletes de los accesorios cómodos y el bagaje familiar y elegir entrar en esta práctica. Debemos entrar para poder participar. De otro modo, sólo podremos seguir soñando, hablando, y escribiendo sobre lo que O-Sensei demostró en la mirad del siglo XX. La elección permanece abierta para los participantes que buscan la realidad de su aikido. Otros, los que prefieren practicar de la manera normal, pueden considerar la tesis de este artículo como una afirmación recurrente de la crisis de identidad del aikido que demanda claridad

El Dojo

El dojo es el lugar donde se practica la vía de Buda, el Budismo. Por analogía, el sitio en donde se practica (shugyo) la vía de Bu se llama dojo. SHU: ideograma que compuesto de los elementos “blanco” y “alas” muestra el movimiento repetido de las alas del pájaro con las que puede tomar el vuelo; dando una imagen de repetición, de aprendizaje, de estudio, de maestría. El “blanco”, a la vez que da idea de claridad representa en el origen lo blanco escondido en el interior de la semilla. Shugyo no quiere sólo decir “ejercicio” o “entrenamiento” sino desarrollo de la personalidad arte de vivir noblemente…EI dojo no es pues solamente un gimnasio; me gustaría que pensarais que es a la vez una iglesia y un gimnasio. Por esto es por lo que desde los tiempos más remotos podemos encontrar un altar en los dojos japoneses, situado en el kamiza. Este altar contiene al dios de las artes marciales que allí se venere.En el dojo el hombre que se entrega a las artes marciales, practica una purificación profunda, para afirmar su personalidad de guerrero, sus capacidades, su espíritu, su tesón, su fuerza de alma. Debe reencontrar en el dojo la cortesía, la educación, los buenos modales y observar las reglas de las buenas maneras. Al entrar en el dojo hace falta descubrirse, quitarse el calzado, tener una actitud respetuosa, el cuerpo derecho y orientar los pensamientos hacia la pureza, la luz. En el dojo, hace falta estar siempre limpio, respetar la etiqueta, usar términos correctos, ser digno, evitar el hablar en voz alta. Los espectadores deberán observar la misma actitud.El keikogi, el hakama no deben indisponer a los otros. El dojo debe de estar aireado, los tatamis bien calzados para evitar accidentes. Todo esto es importante.Normalmente los practicantes intentan llegar antes que nadie para limpiar y ordenar el dojo; sucede lo mismo después del ejercicio. Esta limpieza no concierne solamente al dojo en sí, sino también al practicante que por este gesto procede a una limpieza en profundidad de su ser. Lo que significa que, incluso si el dojo parece limpio hace falta limpiarlo más y más.Cuando practiquéis considerad que el dojo es también un campo de batalla; lo que quiere decir que en ningún momento podéis estar “vacíos de ki”. ¿Como explicarlo? Estad atentos, preparados, despiertos, percibid, sentid, controlad; tened a fin de cuentas la misma actitud que en una batalla, en donde debemos trascender el estado de vida o muerte hasta un punto tal en que incluso muertos en un 99% debéis ser capaces de ordenar a vuestro corazón que no abandone el combate. Ésta es la verdadera vía.Actuando así, avanzareis, es una certeza, en el verdadero desarrollo del Ser y esto es lo único importante.Al salir del dojo, hace falta tener la misma actitud que al entrar. Esta actitud es a la vez un agradecimiento por la clase que os acaban de dar, un examen sobre vosotros mismos, una reflexión sobre lo que acaba de suceder con respecto a nosotros y una preparación para el devenir.Sin duda podréis captar la actitud hacia la práctica y el respeto que emana de este texto colocado en el antiguo dojo y escrito con grandes caracteres de trazo noble y seguro:Disposiciones del espíritu para el Ejercicio
1. Un golpe en Aikido puede decidir sobre la vida o sobre la muerte. Durante la práctica, obedeced las instrucciones de aquel que dirige la clase. No transforméis la práctica en un absurdo test de fuerza.2. El Aikido es un camino mediante la cual por medie de UNO se puede llegar a alcanzar los diez mil seres”, incluso con un solo adversario, es necesario no preocuparse únicamente de lo que tenemos delante, es necesario practicar estando atento a las cuatro, a las ocho direcciones.3. Es preciso trabajar en la alegría.4. Las enseñanzas de aquel que da la clase no representan más que un fragmento del Aikido. Cuando por la búsqueda y el entrenamiento cotidiano y constante de uno mismo, hayáis llegado al conocimiento por el cuerpo, os será permitido el verdadero uso de las maravillas del Aikido.5. El entrenamiento diario comienza por tai no henka, después se practica más y más intensamente; sin sobrepasar los propios límites, lo cual permite a las personas de mayor edad el practicar placenteramente sin riesgos de herirse y el alcanzar el objetivo de la práctica.6. El Aikido es una búsqueda que tiende por el ejercicio del cuerpo y del espíritu a modelar un hombre de recto corazón. Todas las técnicas, sin excepción, son secretas y no pueden ser mostradas sin discernimiento a aquellos que no las practican.Es preciso evitar enseñarlas a aquellos que harían un mal uso de ellas(Cartel colocado en el Aikikai So Hombu desde 1931>